[Reseña] Nadie muere en Wellington

Leí por primera vez a Carmen Sereno con su bilogía Estocolmo y me sorprendió un montón (reseñas aquí y aquí). Fueron unos libros muy adictivos que me tuvieron pegadas a las páginas. Por eso, cando salió la noticia de su nueva novela supe cien por cien que tenía que hacerme con ella y leerla. Además, la pintaza que tenía era increíble y presentía que iba a ser de esas historias que llegan al corazón, intensa y especial. ¿Queréis saber qué ha pasado al final? ¿Si ha cumplido mis expectativas o no? ¡Sigue leyendo para averiguarlo!

Nadie muere en Wellington nos cuenta la historia de Emma, quien cuando era muy pequeña perdió a sus padres y ha vivido desde entonces con su tía en Londres. Un trabajo frío, una relación muerta y la despreocupación de su tía por su propia salud; esto, y un acontecimiento que lo cambia todo, hará que Emma decida de una vez marcharse de la ciudad y explorar nuevos sitios, en especial, Wellington. Allí, con ganas de empezar de cero, comienza a trabajar como camarera para David, un hombre con una personalidad muy retraída y difícil de tratar. En cambio, la intención de Emma es no rendirse con él. ¿Podrán ambos apoyarse el uno en el otro para resurgir o los secretos los arrastrará?

—Gracias por los ánimos, pero dejé de soñar hace mucho.

—Sin embargo, los sueños son los que nos mantienen vivos.

—Se equivoca, Emma. Lo que nos mantiene vivos son los recuerdos.

La rotundidad de su afirmación me hizo entender que el dardo se había clavado muy cerca de la diana y el silencio volvió a precipitarse sobre nosotros como un alud.

La sinopsis de esta historia me atraía como la luz a una polilla, en serio. Tenía algo que me llamó desde el primer momento y desde entonces llevaba con mil ganas de leerla y, sobre todo, devorarla. Es por ello que, en cuanto la tuve conmigo, no pude resistirme a empezarla. En tan solo las primeras páginas, la autora ya fue capaz de introducirme en la trama de una forma increíble. Esto ha sido así gracias a que la narración (desde la perspectiva de Emma) es muy realista y te hace conectar mucho con ella y su situación, llegando a ponerme muchas veces en su piel y sufrir, enamorarme, emocionarme, reír... Además, algo que me ha gustado muchísimo de ir leyendo este libro es ir descubriendo las descripciones y los lugares que se narran en él, haciendo que me fascinara por completo por Wellington. Esta es la típica historia en la que veo como un punto muy positivo todas las descripciones que se leen, también porque están muy bien escritos para el lector y no se hacen para nada pesadas. Por otra parte, el desarrollo de los acontecimientos, durante toda la lectura, te tiene en vilo y sobre todo, lo relacionado con la relación entre los protagonistas. Carmen Sereno ha sido capaz de transmitírnoslo de una forma muy delicada y especial que llega al corazón. Su pluma ya me gustaba, pero leyéndola en una historia como esta me ha confirmado todo lo que es capaz de hacer con las palabras.

Vayamos ahora con los personajes principales:

Empecemos con Emma, quien decide empezar su vida desde cero para huir de todo malo que le ha estado dando Londres. Para ello, viaja hasta Nueva Zelanda y allí, gracias a Davis, trabajará como camarera. Con este personaje me ha pasado que, desde el primer momento en que la conocemos, hace muy poca falta saber mucho sobre ella para conectar con su personalidad y forma de ser, sobre todo, porque es cercana y cabezona, con unos ideales muy claros y una fuerza que cada vez sale más a luz conforme coge confianzas. Me ha gustado mucho como va evolucionando a lo largo de las páginas porque leeremos a dos Emma muy diferentes al principio y al final de la historia. Lo único "malo" que tendría que decir de ella es que, a lo largo de las páginas, se pierde un poco su esencia, pero esto no es nada muy importante para mí porque apenas se nota.

Y luego tenemos a David, el jefe de Emma, quien desde el primer momento no quiere a la forastera cerca, pero decide que puede serle de bastante utilidad para sacar su negocio adelante. Sin embargo, lo que él no sabía es que Emma es testaruda hasta decir basta. Tenía muchas ganas de conocer a este personaje y la verdad es que, su primera aparición dice mucho de él. Me llamó mucho la atención y desde ese momento me fue conquistando poco a poco a pesar de esa actitud distante, fría y a veces despreciable. Conforme vamos leyendo lo conocemos más y ahondamos en su pasado, el cual lo mantiene sumido en una gran oscuridad. Me gusta mucho que el personaje tenga altibajos y vayamos viendo como sus muros van cayendo. Su evolución es magnífica y para mí ha sido un gran personaje. 

—Un penique por sus pensamientos.

Vi que la nuez le ascendía y le descendía con rapidez antes de atreverse a plasmar en palabras lo que sentía.

—Yo… No sé ni qué decir, tengo un nudo en el estómago ahora mismo. Creo que es usted la mujer más valiente, fuerte y honesta que he conocido en toda mi vida.

—Una mujer con debilidades, heridas y cicatrices.

—Todos tenemos cicatrices, Emma.

La novela cuenta con casi cuatrocientas páginas que, como os he comentado un poco más arriba, desde el principio son capaces de meterte de lleno en la trama y en sus personajes. Si te lo propones, esta historia se puede leer en un día perfectamente, pero yo recomiendo dosificarla y empaparte al máximo de las palabras y las descripciones, que son maravillosas. Además, los capítulos no son nada largos por lo que se van haciendo cada vez más adictivos al dejarte con muchas ganas de más y más. Luego, la relación de amor que se crea entre los personajes principales me ha parecido intensa, especial y preciosa. Se cuece a fuego lento y desde el principio tiene tiras y aflojas que te mantienen en vilo durante toda la lectura. El romance entre Emma y David tiene mucho por lo que pasar y está todo contado de una forma tan delicada y con tanto sentimiento que me he enamorado de cada uno de esos momentos íntimos entre ellos. Presentía que iba a ser una gran historia y así lo ha sido. Carmen Sereno ha mejorado muchísimo en cuanto a su bilogía anterior (aunque sean tramas totalmente diferentes) y me ha dejado con ganas de mucho más, lo que sea.

Y ya, para terminar esta reseña, el final de la novela, aunque en este tipo de historias sea predecible, se hace tan bonito de leer que te olvidas de todo lo que crees que va a pasar y disfrutas al máximo de cómo se va desarrollando la trama y por todo lo que van pasando los protagonistas, que no es poco. He terminado de leer este libro con una sensación de liberación en el pecho porque el cierre de la historia deja a cada personaje en su lugar y el epílogo es ese último capítulo que todo lector quiere leer para cerrar definitivamente el libro y soñar.

En definitiva, Nadie muere en Wellington se trata de una historia llena de mensajes como las segundas oportunidades, el comenzar de cero, conocer mundo y nuevas personas, aceptar el pasado y vivir con él y sobre todo, aceptar el amor en todas sus formas. Carmen Sereno ha conseguido transmitirnos todo esto gracias a una trama que nos hace viajar, sentir y vivir junto a unos personajes con un trasfondo increíble y único y una pluma cercana y especial. La recomiendo muchísimo si queréis leer una novela que os llegue al corazón.

¿Habéis leído esta historia? ¿Y a la autora? 💖💖

¡Dejadme un comentario y os leo! 😙😙